jueves, 23 de abril de 2009

BIEN POR SEAT, REGULAR CON EL RESTO DE PROBLEMAS.

Por fin, el Q3 se queda en la fábrica de Martorell y el esfuerzo realizado por el President Montilla, la Administración y los TRABAJADORES ha dado un resultado positivo, y el peligro que se cernía sobre los 1500 puestos de trabajo directos, por ahora ha desaparecido.
En el año 2007 SEAT cerró sus cuentas con un superávit entorno a los 4.000 ó 4.500 millones de euros. Esos beneficios no se repartieron con los trabajadores, ya que estamos hablando de una empresa privada, pero ahora, en época de vacas flacas, piden ayuda a la administración y el sacrificio de la congelación salarial a los trabajadores. No estaría mal que los sindicatos, cuando negocian con la empresa se lo recordaran, aunque ahora lo prioritario es salvar los puestos de trabajo.
Las grandes multinacionales se han acostumbrado ha engordar, recoger los frutos de la administración, a estrujar al trabajador y cuando han conseguido sus objetivos se van de España porque han encontrado otros paises donde poner en práctica lo que antes han hecho en nuestro pais.
No obstante, no toda la culpa es de estas empresas. Si de verdad España es la octava potencia económica del mundo, tiene que comportarse como tal, y hoy día aún no es así. Como país moderno, no hemos debido permitir el gran peso que la construcción ha desempeñado en nuestra economía. Los especuladores del ladrillo han destrozado nuestro paisaje, han edificado ciudades fantasmas en medio del campo, donde antes había pueblos encantadores ahora han plantado rascacielos, han destrozado por igual costas y montañas.
Y todo para especualar con viviendas que no se necesitaban, como lo demuestra el enorme stock de viviendas a la venta sin comprador.
La responsabilidad de esta situación es compartida, empezando por los bancos que perseguían a los clientes para darles dinero (a los mismos que ahora se lo niegan), y continuando por los especuladores que hicieron su agosto, pero tampoco se libran los ayuntamientos, de cualquier color que no hicieron ascos a las enormes cantidades de dinero que ingresaron en sus arcas en concepto de permisos de obra, y en ocasiones negocios sucios que han acabado en los tribunales.
Y mientras se estaba fraguando el estallido de la burbuja inmobiliaria, que todo el mundo estábamos esperando, pues no hace falta ser muy listo para ver que la situación era insostenible, no se hizo nada para el día después.
Así hoy nos encontramos que al no haber invertido lo suficiente en I+D, al no haber modernizado nuestras estructuras de producción, ni en la parte tecnológica, ni en la parte humana, nuestra producción hora, es mucho menor que la de nuestros vecinos, motivo por el cual nuestros productos son más caros que los de nuestros competidores. Eso, junto con la enorme deuda que estamos contrayendo a consecuencia del paro, lastrará nuestro futuro y hará que España sea de los últimos paises en salir de la crisis por que va a costar mucho colocar en el mercado unos productos más caros que los de nuestros vecinos.
¿Qué deberíamos haber hecho? No dormirnos en los laureles y no basar nuestra competitividad en los bajos salarios, si no en el aumento de la producción. En pocas palabras, no hemos hecho los deberes y ahora recogemos la cosecha de lo que hemos sembrado.
Por eso, creo que es tan importante la firma de un pacto de estado entre todas las fuerzas políticas y sociales, como los famosos Pactos de la Moncloa, pues la situación así lo exige, aunque nuestros políticos NO ESTAN por la labor.
Pilar Cardeña Cruz